miércoles, 8 de septiembre de 2010

Las últimas horas en el Capali Carsi



Es el conocido Gran Bazar de Turquía. Habíamos rodeado las calles que lo circundan, pero no habíamos entrado en esta especie de centro comercial turco, con las joyerías más llamativas, los tejidos de todo tipo, los adornos, las lámparas, los paquetes de tabaco, y de té. Nos vamos a dejar las últimas liras turcas en pequeños recuerdos.

Inma y yo hemos madrugado, dejamos a los niños solos. Si, solos en el apartamento. Esta ciudad ya es nuestra casa, tenemos confianza y conocemos como movernos por ella. Así rapidito, podemos recorrer las calles, con un zumito de naranja y granada en el cuerpo, y un café y un pastel más allá.

El tiempo apremia, de repente la hora nos aprieta. También las ganas de encontrar un servicio para evacuar el desayuno. No hay forma. Corremos arriba y abajo, derecha e izquierda. Por fin el tranvía. Nos hemos quedado sin dinero. Sacamos las últimas 50 liras, que eran para pagar el taxi, podemos volver a a tiempo por los pelos. Inma me gana por un cuerpo de ventaja para entrar al baño, y yo casi me lo hago encima, pero aguanto estoicamente…

Los niños nos esperan tranquilos, con su equipaje ya preparado y los cacharros de la cena fregados. Es un placer viajar con ellos.
Pedimos un taxi pirata, que es más barato, y es lo más que podemos pagar. Aunque vamos con tiempo hay mucho tráfico, pero nuestro conductor se cruza de carril de un lado a otro, buscando los resquicios de cada fila de coches, y nos deja en el aeropuerto por tan sólo 30 liras.

Aún nos quedará para un café, comemos unos bocadillitos en el aeropuerto, de chorizo español, con mortadela turca. Es increíble como nos administramos, aún quedan 2 plátanos, y tenemos agua fresquita.

Nos despedimos de Turquía, por ahora. Aún tenemos que volver a La Capodocia, a las islas del mar Egeo, a Pamukkale y Hierápolis, a Izmir a las regiones asiáticas de la Anatolia.
En fin, que grande es este mundo, y que poco tiempo nos dan para conocerlo.






Volviendo de las islas tranquilas

Me parece mentira, estar navegando de una isla a otra, por este archipiélago de las Princes´Island.
Un día soleado, la brisa del mar, el olor a pescado, el olor de los caballos que galopan por la isla. No hay coches. Enfrente nuestra la enorme y bulliciosa ciudad de Estambul, pero en esta orilla la tranquilidad absoluta. Paseo en bicicleta, té y café. Mañana ya estaremos echándolo de menos.




Regresamos de noche. Hemos apurado el día, y el puente del Bósforo, con sus luces de colores nos deja una última imagen brillante en la retina.






martes, 7 de septiembre de 2010

Los tandem

Siempre hay una primera vez para todo... y esta ha sido nuestra primera experiencia en tandem.
Nos hemos recorrido media isla en tandem. Al principio, ha costado un poquillo cogerle el tranquillo, a estar bien sincronizados en el pedaleo... Lo complicado era esquivar al mismo tiempo las gaviotas, los gatos, los caballos o alguna que otra persona...sin perder el equilibrio.

Buyucada

Buyucada es otra isla que está en el Mar de Mármara, que pertenece a las denominadas Islas Príncipe. Es la más lejana de un conjunto de 9 islas (ya estuvimos en la segunda). Se tarda cerca de 1 hora y media en llegar, en un barco que, por 6 € hemos ido los 4 (bueno, en todos los medios de transporte intentamos no tener que pagar por los niños).
Con unas inmejorables vistas de fondo, hemos rebañado hasta la última espina de las doradas a la brasa... ¡deliciosas!

lunes, 6 de septiembre de 2010

Navegando por el cuerno de oro

Es verdad que poca gente sabrá que es eso del cuerno de oro. Nosotros lo hemos descubierto en este viaje, y es que mirando detenidamente el mapa de Turquía, en Estambul,  se puede observar una entrada del mar con forma de cuerno, por la que cruzan barcos y que tiende puentes entre sus dos orillas. Hoy un barco muy aparente nos cruzaba el susodicho cuerno, para dejarnos en el barrio de EYUB, desde donde un teleférico nos subía a lo alto de una colina, sin mucho más interés que el de un garito bien situado, un cementerio enorme lleno de tumbas turcas, y eso sí, unas vistas acojonantes de la ciudad.

domingo, 5 de septiembre de 2010

Museo de Santa Sofía

La Basílica de Santa Sofía, que ahora es un museo, es la obra más grande de la época bizantina. Fue utilizada como iglesia durante 916 años, desde su construcción en el año 537 hasta la conquista de Estambul en 1453, donde se utilizó como mezquita hasta 1934.Después, se inauguró como museo. Es la cuarta iglesia más grande del mundo. Es impresionante.

El mercado de las flores

Con nuestra cámara de fotos, nos vamos llevando todo lo que hay en todos los puestos: las flores, las frutas, los pescados... No todo es necesario comprarlo, pero sí digno de ver y recordar.

La resaca y los bazares egipcios...

Como toda fiesta el día después tuvo su resaca. Nos pilló más cansados, y dormimos sin prisas.


El día hoy está nublado y llovizna, así que nos vamos  de paseo al centro sin rumbo fijo, a comer kebab y visitar el bazar egipcio. Estos turcos no paran de ofrecernos todo tipo de artículos de adorno, ropas, comidas, etc, y a nosotros cada vez nos queda menos dinero.

sábado, 4 de septiembre de 2010

Despues del partido

Esta es la cara que se te queda después de ver a tu equipo ganar en Turquía, para todo lo demás MASTER CARD